Comentarios del Dr. Mario Pellegrini sobre la carta del Dr. Julio Bello

Comentario del Dr. Mario Pellegrini sobre la opinión del Dr. Julio Bello

Excelentes las apreciaciones del Dr. Julio Bello.
Podría denominar como "nostalgia" los preceptos que nos inculcaban en Instrucción Cívica y en Educación Democrática: las funciones esenciales e irrenunciables del Estado eran Defensa, Seguridad, Justicia, Educación y Salud.
Desde la época menemista, la Defensa Nacional no existe. No tenemos ni para fabricar aviones o barcos de papel. ´
La Seguridad se ha privatizado en gran parte, y está a cargo de empresas dirigidas por ex represores, con personal en negro sin capacitación.
La Justicia se está privatizando s través de la mediación. Los jueces perciben salarios que nunca recibirían en la actividad privada y tienen una jubilación que en poco tiempo será acorde a lo que ahora reciben. La política entra y sale de los Juzgados como Juan en su casa. No hay seguridad jurídica, salvo en algunos fallos de la Corte Suprema.
La Educación ha sido un desastre con los famosos EGB y el polimodal. Los estudiantes no aprenden a razonar. Las escuelas de gestión privada han pasado a ser empresas.
En cuanto a la Salud, ha sido afectada desde la época de "Paco" Manrique, que le entregó la gestión de gran parte a los "gordos" de las Federaciones y Confederaciones Nacionales. En la época de Menem, aparecieron las empresas "mandatarias", que servían para lavar dinero recibido por los "gordos" por debajo de la mesa. También aparecieron las "gerenciadoras", a cargo de testaferros que no solamente evadían las prestaciones, sino que también evadían los pagos a los profesionales mediante quiebras fraudulentas. La Salud, que debería estar a cargo del Estado, está bajo en control de las Obras Sociales sindicales y privadas, que llenan los bolsillos de sus administradores y propietarios. Es cierto que los pudientes no tienen inconvenientes con las erogaciones y que los indigentes tienen la ayuda púbica, aunque mas no sea haciendo "colas" desde las dos de la madrugada. Pero es cierto, como lo expresa el Dr. Bello, que las denominadas "clases medias" no tienen amparo alguno. Ni los profesionales comunes, ni los empresarios de pymes, ni los cuenta-`propistas ni los millones de argentinos de ingresos medios pueden acceder a las "cimas" prepagas ni a las "simas" de la Salud Pública. Es verdaderamente preocupante, y entiendo que es necesario establecer un diagrama tentativo para estabilizar la situación.
Afectuosamente
Mario